“Dentro
de la sala de juntas del ayuntamiento está todo el pueblo. Presiden la asamblea
el cura, el alcalde y el cabo de la Guardia Civil. Teodoro se ha puesto las
gafas que usa su padre cuando va en sidecar. Ahora, como está en interiores,
las tiene subidas a la frente. Susan está, de pie, detrás de la silla del
alcalde.
ALCALDE:
En resumen, hemos ganado los de siempre. Es decir, alcalde, yo; cura, don
Andrés; para maestro no se ha presentado nadie, o sea, que sigue don Roberto.
De puta, Mercedes. De adúlteras han salido cinco, pero ya se lo diremos a
ellas, para que los maridos, si pueden y quieren, se enteren, y, si no, no. No
hay monja y la Cristina va a probar de marimacho unos meses. También ha salido
que los de la invasión se tienen que ir. Y, si hay algún americano, también.
Los
jóvenes estudiantes de la Universidad de Eaton se van indignados. Los
disidentes de los Coros del Ejército Soviético los acompañan, dándoles
consuelo. Teodoro levanta la mano.
ALCALDE
(Que lo ve): Tú, no. Tú estás en Oklahoma cumpliendo con tu deber. O sea que,
si quieres, te quedas, o, si quieres, te vas.
Teodoro
insiste con el brazo levantado.
ALCALDE:
¿Qué quieres?
TEODORO:
No. Yo es que quería defender un poco a los americanos, porque también tienen
cosas positivas…
ALCALDE
(Interrumpiéndolo): Vete a la mierda, hombre. Bueno, ya sabéis los resultados.
Lo primero que quiero deciros es que, como ya conocéis mis ideas, la muchacha
me la quedo para mí solo.
Revuelo,
cuchicheos. Susan sonríe halagada. Un grito ahoga los murmullos.
LABRADOR:
¡Di que sí, alcalde! ¡Nosotros somos contingentes, pero tú eres necesario!
VOZ:
¡Viva el señor alcalde!
GRITOS:
¡Viva!
El
cabo Gutiérrez dice algo inaudible al oído del alcalde.
ALCALDE:
Falta una cosa. En cuanto a los elegidos para el Orden Público, os tiene que
comentar algo el cabo Gutiérrez.
ALGUIEN:
¡Viva el cabo santo!
GRITOS:
¡Viva!
El
cabo pide silencio.
GUTIÉRREZ:
Ha ocurrido algo que os tengo que comentar. La Guardia Civil ha perdido las
elecciones. Las ha ganado la Secreta. Eso sí, la Secreta somos nosotros mismos…
Menos… menos Fermín. El guardia Fermín queda fuera de las fuerzas de Orden
Público. En cualquier caso, yo pido un aplauso muy grande para el guardia
Fermín.
Grandes
aplausos y gritos de: ¡Fermín! ¡Fermín!”
(Amanece
que no es poco. Film de José Luis Cuerda)
La frase que resume el motivo de esta entrada en el blog es esta “En
resumen, hemos ganado los de siempre…”
Y es que la nueva disposición que el gobierno de Mariano Rajoy quiere
regular sobre la elección directa de los alcaldes viene a ser así, como en Amanece que no es poco.
Y es que la irrupción de PODEMOS, esta formación a la que dedicaré una
entrada en el blog con más calma, ha hecho reaccionar a las fuerzas
tradicionales, PP y PSOE, para intentar cambiar el sistema electoral, y el
sistema de elección de determinados cargos, aunque el sistema que al parecer
propone el PP sería más de lo mismo.
Porque la primera idea del gobierno Rajoy es la de elegir en primera
vuelta al candidato más votado, aunque no tenga mayoría absoluta (un cuarenta
por ciento de los votos sería suficiente), lo que impediría las coaliciones de
partidos de la oposición para echar al alcalde.
O sea, más de lo mismo, porque, sin duda, esta reforma va encaminada a
conservar las alcaldías de las ciudades más importantes de nuestro país para su
propio partido. Imaginaos. Rita Barberá, la reina de los bolsos Vuitton y
fallera mayor de Valencia, a pesar de haber perdido intención de voto, y de no
obtener, según las encuestas, la mayoría absoluta, podría volver a reeditarse
en la alcaldía levantina, sin necesidad de tener de dar cuenta de ningún
concejal de la oposición para ser elegida.
Qué decir del alcalde de Valladolid, el señor que sería incapaz de subir
a un ascensor con una señora, no sea que se quite los sujetadores y diga al
salir que ha intentado abusar de ella.
O tantos otros, la corrupta Sonia Castedo, alcaldesa de Alicante…, y
porque no se presenta nuestra querida Relaxing cup of café con leche, Ana
Botella (Ann Bottle in inglish of la capital del State), y temiendo la
irrupción de nuestra querida Tomb Raider Espe Aguirre, para acabar de hacer
castiza la elección de alcaldes.
Pero es más: pretenden hacerse con la casi totalidad de las alcaldías
más importantes, teniendo en cuenta que muchas de las que gobierna actualmente
el PSOE, las gobierna en coalición con otros partidos de la izquierda u otras
formaciones, como por ejemplo Zaragoza, donde el marido de la pianista Mari
Cruz Soriano, el socialista Belloch, gobierna con el apoyo de Izquierda Unida y
de la Chunta Aragonesista, y donde el PP ganó con más del cuarenta por ciento
de los votos… Y así, otras tantas.
Ahora, imaginaos que esto se extrapolase a comunidades autónomas y al
gobierno del Estado… La acción anti-Podemos, formación que según las encuestas
ya atesora el tercer puesto y respirando sobre el cogote del PSOE y no muy
lejos del PP, va camino del efecto boomerang… Como más cosas se hagan contra
Podemos, más fuerza le da en las urnas. Como ya os comentaré en la entrada
sobre Podemos, formación que, en principio ilusiona al personal, pero que, a mí
personalmente, no me acaba de convencer, ha entrado con fuerza porque las
fuerzas tradicionales no han sido capaces de romper el status quo de la
transición para avanzar con propuestas de futuro en todos los ámbitos, sobre
todo, los de la regeneración democrática, y ésta es, precisamente, la excusa
que el gobierno pone para hacer esta reforma del sistema de elección de
alcaldes, la regeneración… Me da la risa, y es que la frase del alcalde sobre “en
resumen, hemos ganado los de siempre…” va que ni pintada para esto.
Y es que, gane quien gane, esto es como el anuncio del cabo Gutiérrez,
ha perdido la Guardia Civil, pero ha ganado la Secreta, que somos nosotros
mismos…
Os pongo el enlace a las escenas
de la película Amanece que no es poco que
he reproducido por escrito en el inicio de la entrada: https://www.youtube.com/watch?v=D-o5bahaCv8
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